Hoy, hace poco más de 36 años, Brenda Ann Spencer disparó a varias personas en la Escuela Elemental de Grover Cleveland en San Diego, California; hirió a ocho niños y a un policía y mató al director y al conserje, desde una de las ventanas de su casa, frente al edificio. El fusil semiautomático Ruger 10/22 calibre 22 con mira telescópica y 500 municiones que utilizó, se lo había regalado su padre, Wallace Spencer.
Cuando le preguntaron los motivos, dijo…I Don’t Like Mondays.
También dijo una frase un poco más siniestra:
No tengo ninguna razón más, sólo fue por divertirme, vi a los niños como patos que andaban por una charca y un rebaño de vacas rodeándolos, así que eran blancos fáciles para mí.
Unos meses después, Bob Geldof, de The Boomtown Rats y protagonista de The Wall compuso esta canción, que, lógicamente, fue número uno de la lista de éxitos del Reino Unido, durante cuatro semanas del verano de 1979.